Las uvas y su historia (Ana E.)

septiembre 26, 2008 at 8:00 am Deja un comentario

Ha llegado septiembre, el mes de la recogida de las uvas y de empezar a elaborar el vino. Así que vamos a hablar un poquito de esta fruta.

Las uvas, granos de uva, vienen en racimos y son pequeñas y dulces. Se comen frescas o se utilizan para producir  mosto, vino y vinagre. Es una fruta que crece en racimos de entre 6 y 300 granos. Pueden ser de diversos colores, negra, morada, amarilla, dorada, rosadas, marrones, anaranjadas… En España, la mayoría de uvas que se cultiva proviene de la familia Vitis vinifera.

La vid es una de las primeras plantas que cultivó el hombre, motivo por el cual ha jugado un papel trascendental en la economía de las antiguas civilizaciones. Tras la mitificación del vino por parte del cristianismo, el cultivo de la vid experimentó un gran auge que ha perdurado hasta nuestros días. De hecho, la mayor parte de la producción de uva se destina a la elaboración de los distintos tipos de vino (blanco, rosado y tinto) y otras bebidas (mosto, mistelas, moscatel). Los botánicos sitúan el origen de la uva cultivada en Europa en la región asiática del mar Caspio, desde donde las semillas se dispersaron hacia el oeste por toda la cuenca mediterránea. Los antiguos griegos y romanos cultivaban la vid y ambas civilizaciones desarrollaron en gran medida la viticultura.

Fueron los colonos españoles los que introdujeron la vid en América del Norte, desde donde se extendió por todo el continente, pero el intento fracasó a consecuencia de los ataques de parásitos y las enfermedades. Como resultado de ello, a finales del siglo XIX la explotación de la vid en Europa sufrió un gran golpe tras la contaminación por un insecto americano llamado filoxera, lo que obligó a adoptar las vides americanas resistentes a la plaga como patrones de la vid europea, y se obtuvieron variedades resistentes, fruto de la hibridación de ambos tipos de plantas.

En la actualidad, las variedades de uva de mesa que más se cultivan en España son la moscatel, lambrusca, muscadina, … y gozamos de la variedad de Uva embolsada del Vinalopó, con deominación de origen. En el caso de uvas para elacorar vino destacamos Palomino, Macabeo, Malvasía, Moscatel, Chardonnay y Garnacha blanca. Para la elaboración de vino tinto: Garnacha tinta, Cabernet Sauvignon, Merlot, Pinot noir, Syrah, Cariñena, Tempranillo (conocida como Ull de llebre en Cataluña, Cencibel en Castilla la Mancha y Tinto fino en Castilla-León), Tintorera y Graciano, entre otras.

La época de la vendimia varía según la madurez de la uva, pero en el hemisferio norte se sitúa entre julio y octubre, dependiendo del grado en azúcar y ácido que se desee (a mayor madurez, más azucar y menos ácidos). Cuando se trata de recoger la uva para hacer vino, la vendimia se realiza de forma manual, ya que así los granos sufren el menor daño posible y el vino será de mayor calidad; sin embargo, para las uvas de mesa, la vendimia suele ser mecánica, mucho más rápida y cómoda.

FUENTE: Producción de materias primas de origen vegetal (cultivos leñosos), alimentación y cultura. Ambos de la UPV.

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